Pretendemos
vivenciar con toda la Comunidad Educativa, valores que permitan desarrollar
actitudes válidas para la inserción posterior de nuestros alumnos en la vida
social y profesional. En función
de ello va toda nuestra programación.
Unos minutos de reflexión al comenzar
la jornada sobre acontecimientos puntuales de la actualidad, nos permiten tomar
contacto con el mundo que nos rodea.
Un trato personalizado y de respeto mutuo nos ayuda a ser tolerantes.
El cumplimiento de las normas establecidas favorecen un discurrir de la actividad docente de modo tranquilo y relajado.
La elección de consejos de curso
facilita la participación de forma efectiva y directa en la gestión.
Un reparto de responsabilidades en lo
concerniente a mantenimiento de higiene en el Centro, ayuda a valorar a quienes les tocan los trabajos más arduos y desagradables.
La disponibilidad de todos los
docentes, permite que las tareas sean compartidas, más efectivas y sobre todo
dando imagen de un verdadero grupo de trabajo comprometido.
La participación en campañas en pro
de la paz y la justicia social pone en activo nuestro espíritu solidario.
Queremos en definitiva que nuestro
trabajo se distinga por:
La sencillez y la alegría.
La
gratitud y la participación
La
humildad y la creatividad
El
sentido crítico y la atención preferente a todos los alumnos, familias y
sectores que tengan mayor necesidad.
“Una
educación integradora de la persona que ayude a nuestros alumnos a descubrir y
potenciar sus posibilidades, propicie el crecimiento de su dimensión social y
potencie el desarrollo de su dimensión ética”
"Un profundo respeto a la persona,
porque la propuesta educativa de nuestro Centro quiere respetar LA LIBERTAD de
los alumnos, profesores y padres".